4 de mayo de 2010

A veces las expectativas nos traicionan

Navegando por los Blogs de mis alumnos/as, esta semana mi escritorio está repleto de comentarios sobre la discapacidad intelectual.

Como siempre y porque al fin y al cabo soy una persona apasionada, no he podido evitar hacer aquí una pequeña referencia a una especie de debate que surge en mi cabeza, al leer todas juntas, vuestras entradas sobre el tema.


Con respecto a lo que se comentó en clase sobre Pablo Pineda, creo que no es él el que hace daño, sino la mala interpretación de un hecho concreto. Pablo Pineda es a la comunidad Down lo mismo que Unamuno, Picasso, Bill Gates o incluso Belén Estevan son a la comunidad en general.
UN INDIVIDUO; como tal, con características individuales que lo hacen diferente y que por la conjunción de factores internos y externos ha llegado a ser público y notorio. Ni mejor ni peor ojo!!, público y notorio.

¿Cómo podemos culpar a una persona, que ha hecho lo que ha estado a su alcance para ser lo que ha querido, porque en él se vean reflejados otros casos cuyas expectativas se han visto truncadas?
¿Es por tanto para mi un mal ejemplo la inteligencia de Einstein, el arte de Van Gogh o el ingenio de Pérez Reverte?

Desde que empezó el curso, nuestra línea de trabajo ha sido siempre defender por encima de todo las diferencias humanas como algo NORMAL. La normalidad en la diferencia implica por tanto que TODOS somos tan diferentes unos de otros que no podemos trabajar en la búsqueda de lo único común. Lo único común entre Pablo Pineda y cualquier otra persona con Sindrome de Down es eso, NADA.

3 de mayo de 2010

MUCHAS GRACIAS

Hola de nuevo a todos/as,

hace más de un mes que no escribo en mi blog y cuando por fin me he decidido a hacerlo, me ha parecido media vida. ¿Cómo puede uno desconectarse tanto como para que le cueste sobremanera volver a empezar?

No pretendo hablaros de ningún tema de la asignatura...
Tampoco conmoveros o provocar en vosotros/as ningún tipo de reacción...
Pero de repente he sentido el impulso de charlar sobre algo que a estas alturas a todos/as nos apasiona "La desadaptación".

Sí!, habeis entendido bien. Ese periodo por el que TODOS/AS pasamos y que no siempre somos capaces de resolver de manera autónoma.
Como ya sabéis, factores de riesgo hay muchos (perdida de empleo, enfermedad, adicciones), la persistencia del problema agrava la situación y con los apoyos y recursos necesarios, podemos paliar situaciones, que a priori parecen imposibles de solucionar.

Os digo por propia experiencia, que todos/as somos susceptibles de vernos forzados a empezar una situación nueva o cuanto menos diferente. La clave de la intervención se encuentra en ser capaces de ofrecer lo que puntualmente o en determinados momentos un individuo o grupo no es capaz de obtener por si solo; y eso no significa siempre dar a alguien lo que quiere, sino ayudarle a encontrar lo que necesita.

En mi modesto caso personal, no ha sido tanto lo que he pedido, como lo que sin saberlo he necesitado.

Como ejemplo práctico os digo TIEMPO. Tiempo es lo que yo no tenía. Tiempo es lo que yo no quería, y tiempo es lo que realmente necesitaba. TIEMPO es lo que todos/as con paciencia unos y trabajo otros me habéis facilitado.

Gracias a eso empiezo a sentirme bien...
Gracias a eso puedo volver a ser...
Gracias...